“El sacrificio de Cristo y el Sacrificio de la Eucaristía son un solo sacrificio”

 “Este es el Misterio de nuestra fe” 

  Estoy segura de que alguna vez habrán visto imágenes semejantes a ésta. El sacrificio de Nuestra Señor en el Altar, nos lleva a darnos cuenta de la singularidad entre éste y el de la Redención del mundo, llevada a cabo por Cristo en la Cruz.

   Quise además, incluir ciertos elementos, que den cuenta de la majestuosidad de este Misterio, tales como:

- La Hostia y Jesús crucificado, en un casi mismo plano, representan ambos la misma Salvación. 

- Las dos cruces a los costados, símbolos de la humanidad. Más allá de su presencia en las Sagradas Escrituras, quise que acompañaran al Salvador, pues cada uno de los seres humanos lleva su propia Cruz hasta el Cielo prometido. 

- Las estrellas en el cielo oscuro, signos de que en el Cielo se halla Dios y que la luz de la tierra procede únicamente de Él.

- Las vestiduras sacerdotales, de color rojo, el cual se utiliza en la Santa Misa en festividades relacionadas con el Espíritu Santo, conmemoración de mártires, y en este caso, Viernes Santo y la Exaltación de la Santa Cruz. 173

   Éstos y otros más signos pueden ser interpretados por quien se interese en observar esta obra, pero en última instancia todos apuntan a lo mismo; Dios mismo quiso sacrificarse y morir por nosotros, por nuestra Salvación. 

Sagrado Corazón de Jesús. En vos Confío.

San Lucas evangelista, patrono de los pintores. Ruega por nosotros. 

Maria de los Angeles Bruzzese